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Sakkarah

Hoy leí...

Hoy leí...

Hoy leí un artículo sobre el acné, y me transportó a esa adolescencia, que ya me va quedando lejana. Me ha hecho mucha gracia, que advierten que no tiene nada que ver con la masturbación, y es que hace tiempo, por lo que yo escuchaba, se creía así, pero en los hombres.

Recuerdo que había gente que se veían muy afectados, incluso se quedaban llenos de señales. Yo no tuve demasiado, algo me salía por la frente, porque usaba flequillo, pero me preocupaba mucho. El chocolate era mi perdición, las tabletas volaban, y los foskitos, unos bollos riquísimos; pero…me dijeron que  sacaba granos, y lo dejé ipso facto. Y es que a veces, en mi vida, tengo arranques de voluntad.

Algo bueno tiene esto de ir envejeciendo…se acaba el acné.

Sakkarah

6 comentarios

Sakakrah -

Vaya...A mí me toca todo. Seguro que tiene acné, que es un rebelde sin causa, y que encima para colmo puede que esté enamorado...Vale, me lo quedo, pero no te lo pienso devolver cuando esté hecho un hombrecito.

Un beso, Mela guapa.

Mela -

¡¡¡Adolescencia!!! Agggggggggg... no me gustaba ni cuando la tuve yo, hace un millón de siglos o así..

No tuve acné, menos mal, pero tuve de todo lo demás. ¡Qué paciencia la de mi madre!

Por cierto, doy en adopción a un adolescente de 17 (antes de que me dé él a mí). La única condición es que no de admiten devoluciones. (¡Ah, haber elegido muerte!)

Beso, Sakkita.

Sakkarah -

Jajajajaja, anda que si llega a tener razón...Ahora no podría leerte.

Un beso, Capitán.

Capitán Pescanova -

Sakkarah, menos mal que no hice caso de ningún cura, ni de ningún dermatólogo de derechas y seguí practicando en mi adolescencia ese agradable acto de fe en uno mismo: el onanismo.
Un besito.

Sakkarah -

Jajajaja, hay que cuidarse, y la voluntad tiene que acompañarnos, si no...

Un beso, Jazmín.

jazmin -

Bueno si hubiera hecho caso...decían, no puedes quitarte los granos que te quedan marcas!! nada, yo no podía ni verlos y me los quitaba y nunca me quedaron marcas en eso tuve suerte que aún no se como porque tengo una piel de mírame y no me toques.
Los dulces mi perdición, eso sí, la edad me ha dicho fuera esas delicias y con mucho lamento los miro en el escaparate como una niña relamiendose pero no compro, algo he ganado jajajaja
Parece que ahora si tengo voluntad.

Un abrazo, Sakki