Mientras flotaba.
Mientras flotaba sentía el nerviosismo de su madre. Ella también lo estaba, pero tenía muchísimas ganas de dar el paso. Le abrasaba la curiosidad por ver su cara, la de su padre, y la de toda esa gente que presentía siempre cerca.
La verdad es que allí se estaba bien, en comunicación tan directa con ella, en esa soledad que las unía con tanta fuerza. Cada día ocupaba más espacio, y tampoco quería incomodarla tanto; además, su cara tenía que expresar toda esa dulzura que la hacía sentir, y quería verla. A él le presentía muy cercano, y aunque de una forma distinta, sentía que formaba parte de ella, que estaban estrechamente unidos.
Llego el día, y escuchaba los preparativos. El corazón de su madre llevaba un ritmo diferente, estaba muy nerviosa.
La luz era intensa, las caras desconocidas, y ella, con esa cara tan hermosa yacía durmiendo. Tenía ya ganas que la soltaran, que la acomodaran junto a su pecho para poder sentir su piel.
Fue tan profundo ese roce?Inexplicable el sentimiento a través de la dermis. Ahora reía, la miraba, y se perdía en ella; pero él faltaba. Era un reflejo de tristeza en la mirada de su madre.
No habían pasado muchos minutos cuando ella dio un respingo que la sobresaltó. Era él que llegaba apresurado. Venía de un largo viaje, y al notar su mano entre la suya, pudo sentir como se removían los pilares de la tierra estremecidos por tanta felicidad.
Todo quedaba en silencio, todo era sentimiento y novedad.
Sakkarah
6 comentarios
Sakkarah -
Muchos besos.
glauka -
Gracias por este ratico.
Sakkarah -
Gracias, muchos besos.
Anaktub -
Un beso
Sakkarah -
Un beso igual.
Cris de Gramont -
Precioso relato Sakk, y preciosa foto que me la he puesto de fondo de pantalla jeje.
Besitos de azucar.