No cabe duda de que los años
tienen patas.
De otra manera
no podrían distribuir vejeces
ni emprender olvidos
que ofrecen de casa en casa,
ni cruzar umbrales
en busca de herrumbre,
ni trepar hasta la azotea
que es siempre más enana,
ni subir a los autobuses
para rasgar los asientos,
ni comprar en los comercios
tintura de canas,
ni ofrecer a los insectos
el papel de la prensa
del fin de semana,
ni tomar fotografías
de cuartos de siglo,
ni podar las ramas
de los árboles,
ni ir de bares
escupiendo en las botellas
que han de añejarse,
ni destruir la relevancia
de las alianzas.
No cabe duda de que los años
tienen patas.
De otra manera
no podrían pisotearnos.
Jorge Gómez Jiménez
6 comentarios
Sakkarah -
Un beso.
Anaktub -
Un beso
Sakkarah -
Un beso, Dino.
Dinosaurio -
Un beso.
Sakkarah -
Por eso busco a ver que es lo que no puedes saber, pero mira que me lo pones difícil...Eres un profe sabelotodo.
Besos desde la tarima, pero miles, ¿eh?
jnj -
Besos, desde el pupitre (¡qué morbo, besar a la profa!)