Tú has de volver.
Tú has de volver a mí ¿cuándo?
¡Quién sabe?
Pero, has de retornar ¡lo he presentido!
Tú volverás a mí, cual vuelve el ave
tras larga ausencia al suspirado nido.
Retornarás, cual la abatida nave
regresa al puerto que juzgó perdido;
y encontrarás una sonrisa suave
y el fuego de mi amor siempre encendido.
Te aguardaré paciente en el sendero,
desde la aurora hasta el fulgor postrero
del astro rey. Y cuando Febo vierta
su luz de plata, encenderé mi cirio;
para aguardar con férvido delirio,
que amante vuelvas a tocar mi puerta.
Abelardo Barrera Osorio
2 comentarios
Sakkarah -
Un beso, Chesana.
Chesana -
Abrazo.