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Sakkarah

Ser...

Ser...

Ser un número más, un objeto más, es triste. Distinguirse por el mal que infligimos es fácil, pero que nos distingan por ser nosotros mismos es más gratificante.

 

Seguir las propias directrices, no quiere decir que todo nos saldrá bien, pero sí que seremos poseedores de una extraña felicidad.

 

Sakkarah

6 comentarios

Sakkarah -

¡Qué razón tienes...!. Me gusta como lo explicas.

Un beso, Cris.

Cris de Gramont -

En ocasiones por agradar a los demás a quien sea, aceptamos quedar en un segundo plano y sacrificamos nuestro criterio y creo que no es sano.
Ayer o hace poco te leí que no era bueno darse del todo. Nos devaluamos, porque siempre se nos pide mas, y como ya se dio todo no tenemos mucho mas nuevo que ofrecer.
Hay que ser uno mismo a quien le guste bien, y a quien no a Parla.
Y si dicen.... que digan

Sakkarah -

Sí, Poeta, ya es mucho.

Muchos besos con cariño.

Sakkarah -

Siempre es mejor ser uno mismo.

Muchos besos, Margot.

ElPoeta -

No dejarte llevar por la corriente; tener tu propio criterio y ser consecuente siempre... Ser tú en definitiva, que ya es mucho, cariño. Un beso,
V.

Margot -

Ser un número más, un nombre más... cuando eso ocurre, es señal inequívoca de que el olvido anda rondándote. Me quedo con el gratificante anonimato de seguir mis propias directrices, aunque nunca salgan bien... por lo menos, a pesar de las contrariedades, no dejaré de ser yo.

Besos, preciosa.