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Sakkarah

Después...

Después...

Después de formar parte de la luz, o de una estrella, seguí andando. Iban cayendo las capas de ese cielo, y me adentraba en lo desconocido. Allí, una potente luz artificial, una falacia de sol, me tenía entretenida hasta que los plomos se fundieron.

Conocí la noche que no tiene estrellas, ni luna. La que no tiene tonos plateados por los que pasear. No era la noche de los ciegos, pues no sentía la belleza. Era una noche cavernosa y triste.

Y seguí andando, porque uno no puede parar. Se agrietaron las paredes del encierro, y una luz tenue penetraba. Esta vez eché a correr para poder encontrarla. Salí, porque de todo se sale; el día estaba nublado, pero las nubes corren como yo, y sé que dejarán paso al sol.

Sakkarah

12 comentarios

Sakkarah -

Me gusta que me interpretes...

Estaba en un mundo feliz, y me metí en un lugar bellísimo, pero sufrí mucho, lo indecible. No podía salir de ese laberinto.

Al final lo logré, salí, ya nada es como antes, pero espero recuperar toda la luz.

Un beso muy grande.

Pedro -

¿Me dejas interpretar, Sakkarah? ...

Te sientes muy bien, pero la ignota curiosidad te llama. Te guías por las apariencias y caes en la trampa. La tristeza del desengaño atrapa tu ánimo.

De pronto, las emociones negativas aflojan, termina el encierro. Aprovechas para ver que el mundo sigue ahí. Aunque dolida, aparece la esperanza.

Hermoso, Sakkarah, como la vida misma.

Un abrazo

Sakkarah -

Erik...Jajaja, te vas a desgastar.

Un beso.

Sakkarah -

sí, Dino, hay que intentar estar bien.

Un beso.

Dinosaurio -

Buen relato. Sí, a veces hay que correr para escapar de la angustia que nos atenaza.
Un beso.

Sakkarah -

Pero también corre más que tú, y las retirará. Así tendrás plena luz, ya verás que sí.

Muchos besos, Montse.

Mont -

Y anduve...
y olvidé mis zapatos...
y el sol asomaba y me regalaba un tenue rayo...
y cada vez que intentaba abrazarlo, volvía a emparejarse con las nubes.
Comprendí por fin que el viento que arrasta las nubes es más fuerte que yo.

erik -

si

Sakkarah -

Muchas gracias, Ocasiones.

Todo pasa, y la luz siempre vuelve.

Un beso.

Sakkarah -

Muchas gracias, Cris...

Ya me quité esa gafas, y seguro que pronto saldrá el sol.

Un beso.

Cris de Gramont -

A veces andamos tan ofuscados por los problemas que no percibimos un rallito de sol que asoma tímidamente de entre las nubes y como nos pusimos unas gafas de sol, ni siquiera nos damos cuenta de que nos intenta alumbrar.
Hay que darle la oportunidad, esperar y a veces en poco tiempo sale un sol radiante, pero es importante sacarse esas gafas de sol del corazón, que lo oscurecen todo.
Mira a tu alrededor salta a la vista de que todos los soles de la galaxia se dispararían con eclipses por alumbrar una luna llena y brillante como tu.
Arriba los corazones!

Ocasiones -

Eso, deja que el sol vuelva a brillar, porque lo hará antes o después.
Un canto alentado, me alegro, después de ver que has estado de bajón;)
Un beso!!!