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Sakkarah

No se mide...

No se mide...

No se mide el dolor, ni la risa; y se alarga en universos sin fin. Meteoritos que caen incrustándose en el alma.

Es impalpable el sentimiento, luz y noche por el éter.

La tez se presenta diferente en cada oportunidad, o engaña, ocultando la maraña que dentro agita y mueve todo. Uno se dispersa hasta vagar en infinitos insondables. Todo se aglomera, se empuja, en este mundo interno.

Sakkarah

8 comentarios

Sakkarah -

Así es, Mari. Y lo importante, es lo que dices, el tener la capacidad de sentir, que eso es lo que nos hace saber que estamos vivos.

Un beso.

Mari -

Dicen los entendidos, que para poder medir algo es necesario poder comparar la cantidad desconocida de aquello que se quiere medir con una cantidad conocida de la misma magnitud a la cual tomamos como unidad de referencia. Pero, ¿qué unidad de dolor o de amor podemos tomar como referencia para poder comparar y saber si nuestra capacidad de sufrimiento o amor, es grande o pequeña? Difícil, ¿verdad? Nuestros sentimientos son muy objetivos porque los experimentamos, pero intangibles y tan relativos como lo es el propio universo. Pienso que lo importante es tener esa capacidad de sentir, porque es la medida para saber que, realmente, estamos llenos de vida…

Muchos besos.

Sakkarah -

Sí, Ktheryn, los hechos son los únicos que demuestran.

Un beso.

ktheryn -

Imposible medir cualquier sentimiento, mas se puede hacer una idea a traves de la demostración de dichos sentimeintos a traves de acciones..
las acciones, hechos, miden y pesan más q las palabras q se las lleva el viento..
Besos mi corazón-...

Sakkarah -

Muchas gracias, Pedro...

Mil besos.

Pedro -

Tienes una intensa vida interior, atrayente y enigmática

Un beso

Sakkarah -

Bueno...No vamos a pensar igual. Jajajja.

Y sí, el que quiere la miel tiene que apechugar con lo que puede traer.

Un beso muy grande.

Hannah -

Lamento discrepar, pero pienso que el sentimiento, cuando se muestra -y es difícil ocultarlo- es lo único objetivamente visible y tangible que hay en nosotros. ¡Y menos mal que es así!. Es más, es tan objetivable, tangible y visible que si se oculta se enferma. Otra cosa es "medirlo", cierto que es inmedible, y ello es un contrasentido, ya que lo tangible es medible... Bueno, me ha gustado pese a la discrepancia. Por cierto, una forma de "desaglomerizarnos y de dejar de sentir empujones internamente es volvar al exterior lo que sentimos, también esa es la mejor forma de darnos a conocer y comunicarnos, pero también la mejor forma de sentirnos heridos... ¡Nada es perfecto! pero es mucho mejor sentir y mostrar lo que se siente que andar como una piedra, y ya se sabe: si quieres la miel, tendrás que soportar que te piquen las abejas...
Un besote.
Hannah